"Lecciones desde Uruguay" por Verónica Spross de Rivera

“Lecciones desde Uruguay” por Verónica Spross de Rivera

La actualización de los educadores, a la par del compromiso por apoyar a todos los estudiantes hará una diferencia en la continuidad del aprendizaje en este año escolar.

Al igual que los demás países de la región latinoamericana, Uruguay enfrentó el cierre de los centros educativos a causa de la pandemia causada por el COVID-19. Sin embargo, la visión que tuvieron sus gobernantes una década antes puso a los uruguayos en una mejor condición de partida ante la necesidad de poner en práctica la enseñanza remota o a distancia.  

Como señala un reciente informe de Marcelo Pérez Alfaro del BID, el proceso de transformación digital de la educación tuvo un impulso temprano con el Plan Ceibal que proveyó dispositivos –computadoras a todos los estudiantes-, plataforma de contenidos y sistemas de gestión de aprendizajes, además de capacitar a los docentes en su uso y promover nuevas prácticas pedagógicas. Es un caso ejemplar en la región del cual podemos aprender los demás para orientar las acciones que se han vuelto necesarias ante la importancia de llevar los abundantes recursos digitales para beneficio de los estudiantes.

Es de reconocer que en Uruguay hay una valoración por las políticas de Estado. Aún y cuando el Plan Ceibal fue iniciado e implementado por un partido político distinto al actual, se está dando seguimiento al esquema, valorando lo bueno que se ha hecho y procurando fortalecerlo. Esta es la primera gran lección para todos los latinoamericanos muy dados a cambiar las políticas y los programas cuando llega un nuevo Gobierno.

En Uruguay se hizo un importante esfuerzo desde hace 12 años de introducir equipo tecnológico para los estudiantes del sistema educativo. Como parte del Plan Ceibal, se hizo entrega de una ‘laptop’ o computadora personal por estudiante, se desarrolló la base tecnológica, materiales y se buscó ampliar la conectividad, que ha llegado al 90 por ciento de centros educativos.  

Esta inversión acumulada de dos décadas en tecnología para educar, se traduce en la disponibilidad de plataformas, equipo, conectividad y un sistema de capacitación a los docentes, que les ha permitido responder más rápidamente que otros países a la necesidad de migrar a una educación más tecnológica. El número de docentes y estudiantes que ingresaron al sistema de gestión de aprendizajes se multiplicó por cuatro con respecto a la situación anterior a la pandemia, tres de cada cuatro estudiantes se conectaron a la plataforma y ocho de cada 10 docentes lo hicieron. Otro elemento clave en Uruguay es la disponibilidad de internet en un alto porcentaje de los hogares, lo cual es una condición mejor que en la mayoría de países. El 70 por ciento de los hogares de menores recursos cuenta con conectividad, situación muy distinta al caso de nuestro país, donde únicamente el 16 por ciento de los hogares de los estudiantes de centros educativos públicos cuenta con internet.

En resumen, en el caso de Uruguay resalta importancia de la continuidad de las políticas públicas.   Quienes entraron a gobernar asumen el proyecto tecnológico educativo que venía de varios períodos de gobierno, es decir la introducción de la tecnología en la educación se realiza con visión de largo plazo. Además, es de reconocer el profesionalismo de los docentes uruguayos, según lo señala el Ministro de Educación actual, quien explicó que no había una obligación explícita de usar las plataformas, pero al estar muy motivados y con sentido de responsabilidad, además de conocer la plataforma, rápidamente se empoderaron en el uso de los recursos digitales. Y, la cuarta fortaleza es la valoración social de la educación en Uruguay, de lo cual debemos aprender en Guatemala.  

Es momento de priorizar la ampliación de cobertura del internet, facilitar el acceso a dispositivos tecnológicos para los estudiantes y sobre todo apoyar a los docentes para que se incorporen plenamente en el mundo tecnológico; hay diversos programas de formación en línea que pueden llevarlos a innovar. La actualización de los educadores, a la par del compromiso por apoyar a todos   los estudiantes hará una diferencia en la continuidad del aprendizaje en este año escolar.

https://elperiodico.com.gt/opinion/2020/06/04/lecciones-desde-uruguay/

 

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