¡De vuelta a clases con ilusión!

El mayor desafío en la agenda educativa es implementar un sistema de gestión de recursos humanos que permita y faculte la selección y contratación de los mejores candidatos para cada puesto docente.

Ha comenzado el ciclo escolar para 4 millones de alumnos, quienes a la par de sus maestros y padres tiene ilusión y esperanza. Esperamos se cumplan sus expectativas. Es importante reconocer que la educación es clave para que los niños y jóvenes logren una vida plena. El mundo de hoy requiere formar personas con destrezas y capacidades para pensar críticamente, tener iniciativa, creatividad y una amplia base ética para enfrentar permanentemente el cambio. Para tener esta educación se requiere cumplir con la meta de días de clase, contar con docentes preparados y padres comprometidos, así como apoyar a los alumnos para que aprendan y desarrollen las competencias esperadas en cada grado.

Parece sencillo lograr que todos los niños aprendan, sin embargo no lo es. Los resultados de las pruebas nacionales nos indican que el desafío del aprendizaje es grande, aún y cuando en los últimos años hay mejoras, la brecha entre el punto donde nos encontramos y la meta es abismal. Es fundamental el papel del director de centro educativo, quien debe ejercer liderazgo para que la escuela funcione adecuadamente, siendo el motor para que los docentes trabajen como un verdadero equipo en torno a los objetivos de aprendizaje y formación integral, plasmados en el proyecto educativo institucional.

Es fundamental conocer el currículo, pues incluye las competencias y destrezas que todo estudiante debe desarrollar en cada grado. Esta administración saliente deja una revisión curricular para la preprimaria y primaria, que aún no es plenamente conocida por los maestros. Recién fue publicada en la última semana de diciembre. Se ha indicado que se sigue construyendo sobre el currículo nacional base que derivó de los Acuerdos de Paz; sin embargo, para que dicho instrumento llegara a las aulas tomó más de 15 años. Los cambios efectuados hoy deben ser analizados y refrendados o revisados por la administración que asumirá la dirección del Mineduc.

Una acción clave es que lleguen tiempo los programas de apoyo a las 34 mil escuelas. Estos incluyen los útiles escolares para estudiantes, la valija didáctica para docentes, la alimentación escolar, los fondos de gratuidad y el remozamiento de los centros educativos. Estos se ejecutan de forma descentralizada, transfiriendo fondos a las casi 30 mil organizaciones de padres de familia, OPF, que hacen las compras y velan por la preparación de los alimentos para los estudiantes cada día. Se asignan cuatro quetzales diarios por cada estudiante de la preprimaria o la primaria. Los murales de transparencia informan a la comunidad sobre el destino de los recursos.

El 15 de enero ha sido denominado el Día Nacional de la Escuela y en algunos años se han realizado campañas para motivar a las comunidades a sumar esfuerzos para el remozamiento de esta. Que esté pintada, que los servicios sanitarios funcionen y que los escritorios estén barnizados es un mensaje positivo que hace sentir bienvenidos a los estudiantes. Las comunidades escolares pueden unirse en torno al mejoramiento de la infraestructura escolar, dando participación a los actores locales quienes pueden colaborar con la pintura, la lámina que hace falta o aportando su trabajo para reparar los inodoros o lavamanos. Las municipalidades deben participar asegurando la disponibilidad de agua o renovando áreas prioritarias.

Otros temas que deberán ser abordados en las escuelas y por las autoridades es si se cuenta con libros de texto, la disponibilidad de tecnología en los centros educativos y conectividad, la formación en servicio de los maestros, ya sea por medio de programas de actualización o profesionalización. Esperemos este año pueda continuar el programa de profesionalización de docentes del nivel medio, dado que había un déficit de recursos para su continuidad, dado que comenzó con recursos de la cooperación internacional pero no se había asegurado su financiamiento para 2020. El mayor desafío en la agenda educativa es implementar un sistema de gestión de recursos humanos que permita y faculte la selección y contratación de los mejores candidatos para cada puesto docente. Dar la oportunidad a cada estudiante guatemalteco de tener un buen maestro puede hacer la gran diferencia, entre un sistema mediocre y uno que promueva la excelencia educativa. ¡Ánimo! Que sea un buen año escolar.

https://elperiodico.com.gt/opinion/2020/01/09/de-vuelta-a-clases-con-ilusion/