El ciclo escolar inició oficialmente. Lamentablemente, para varias escuelas en el país, grandes carencias han marcado este comienzo. Por ejemplo, en Totonicapán los alumnos han denunciado la falta de escritorios y de maestros, mientras que 250 alumnos en Palencia iniciaron clases sin siquiera tener un aula adecuada dónde recibirlas. Estos son tan solo algunos de los muchos desafíos que el Sr. Ministro de Educación, Oscar Hugo López, deberá enfrentar para cambiar nuestro sistema educativo.
Empresarios por la Educación (ExE) definió tres prioridades en educación para el plan de gobierno 2016-2020 y así cambiar considerablemente el sistema. Estas prioridades son: (i) fortalecer la profesión docente, (ii) el mejoramiento de los aprendizajes de los estudiantes –cobertura y calidad- y (iii) mejorar la gestión del Mineduc. Respecto a este último punto, ExE propuso cuatro acciones concretas para generar un cambio positivo en la administración del ente mencionado. La primera es lograr la entrega oportuna de programas de apoyo en los centros educativos, ya sea fortaleciendo la participación de padres de familia en las Juntas Escolares, promoviendo el uso de los Murales de Transparencia y asegurando que los fondos se ejecuten efectivamente; en segundo lugar, velar porque las personas o entes responsables, le den el mantenimiento adecuado y trabajen en el mejoramiento de la infraestructura escolar; en tercer lugar, trabajar por fortalecer la implementación de tecnología en las escuelas, con ánimos de mejorar el aprendizaje real de los alumnos, y velar porque actores clave colaboren con aumentar la cobertura de tecnología en todo el país y promuevan alianzas publico-privadas para que esto pueda llevarse a cabo. Y, finalmente, contratar a profesionales idóneos para ser Directores Departamentales, principalmente con capacidad de gestión. Este último punto supone no necesariamente destituir a todos los Directores Departamentales, sino permitir que los que tuvieron buenos resultados durante su período continuén realizando esa buena labor.
Cabe resaltar que nuestro sistema educativo se encuentra en buenas manos. El Doctor Oscar Hugo López no solo tiene amplios conocimientos sobre pedagogía y educación, sino también una amplia experiencia en el ámbito, especialmente en el tema de formación docente. Por varios años ha tenido a su cargo la Escuela de Formación de Profesores de Enseñanza Media de la Universidad de San Carlos, siendo también coordinador del Programa de Profesionalización Docente. Por tanto, su entrega y dedicación en este particular tema se ha visto gracias a sus logros.
No obstante, Guatemala necesita transformar su sistema educativo con sentido de urgencia y eso no será fácil. Nuestros niños necesitan mejores maestros, ámbito en que tanto se le distingue al Sr. Ministro, ¿por qué no hacer de la formación de maestros un proyecto permanente para todos los maestros en lugar de solo un hito en el camino? ¿por qué no animar a los maestros a que participen en ese proceso permanente de actualización y evaluación de su desempeño a través de incentivos salariales que los motiven en ese sentido? Por otro lado, actualmente el poco acceso a tecnología en el interior de la República ha hecho de la brecha digital un gran obstáculo que limita el acceso a conocimiento para un gran número de niños y jóvenes, ¿por qué entonces no innovar en torno a mejorar considerablemente el aprendizaje en el aula a través de la tecnologia? ¿cómo nos aseguramos de que el programa de implementación de tecnología en las aulas de clase sea una propuesta integral?, además ¿que incluya consideraciones de costo-efectividad, contenidos digitales, conectividad y, lo más importante, capacitación docente para aprovechar este recurso?
El reto de mejorar la educación de nuestro país es gigante. No solo necesita mayor y mejor inversión en estrategias que impacten positivamente, sino también se necesita que la gestión del Mineduc sea lo suficientemente buena para lograr un salto cuántico en el mejoramiento de todo el sistema. Pero, lo más importante, es que todos nos involucremos en este proceso, las alianzas publico-privadas pueden ser una forma, pero cada uno de nosotros, desde su comunidad como padre de familia o como vecino, podemos apoyar a que las escuelas salgan adelante. Somos todos los guatemaltecos los responsables de transformar a nuestro país. En este nuevo gobierno, ¡velemos por una Guatemala más y mejor educada!
Fuente: Artículo escrito por Salvador Paiz en elPeriódicoy República GT, 21/01/2016
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