Desde hace algunos meses, se viene hablando de cómo fortalecer las ciudades intermedias como un modelo para acortar la distancia al desarrollo económico y social en las distintas regiones del país. En realidad, la preocupación que nos agobia es que no se cuenta con suficiente inversión que genere empleos en los departamentos.
En el área rural muchas personas se autoemplean y se dedican a la agricultura de subsistencia, sin tener oportunidades reales de un ingreso que les permita cubrir las necesidades básicas de sus familias. Recordemos que el exalcalde de Barcelona, Jordi Hereu, quien visitó Guatemala en el marco del ENADE 2016, señaló la importancia de que las ciudades cuenten con un proyecto y que principalmente se orienten a tener espacios de convivencia que permitan la generación de ciudadanía participativa.
Pero, a ello debe sumarse una ciudad que pueda brindar de manera eficiente los servicios básicos de transporte, salud y educación. En Guatemala hoy día es urgente avanzar con paso firme hacia una educación de calidad, que permita a los jóvenes alcanzar las competencias, destrezas y valores que les van a servir para insertarse exitosamente en el mundo laboral y participar en el desarrollo económico que se genere en las ciudades intermedias.
Los resultados de las más recientes evaluaciones nacionales a los graduandos nos muestran que hay rezagos importantes que debemos atender. Solamente 1 de cada 10 jóvenes que se gradúa del ciclo diversificado tiene el nivel esperado en matemática y solamente 3 de cada 10 alcanza el nivel esperado en lectura, según los resultados nacionales.
En algunos de los departamentos, los resultados de los graduandos son alentadores y denotan mejoría respecto de años anteriores. Destacan Chimaltenango y Sacatepéquez en lectura, cuyos graduandos superaron a los del departamento de Guatemala en lectura. Se considera que las acciones y estrategias implementadas como parte del programa nacional de lectura estén rindiendo sus frutos.
Alcanzar las competencias del siglo XXI implica fortalecer matemática y comunicación, pero también desarrollar el espíritu emprendedor en los jóvenes y brindarles las herramientas para que ellos puedan forjar su propio futuro a través de un negocio propio, que a su vez se convierte en un detonante de desarrollo local y les genera los medios para un ingreso familiar mayor. El papel de los alcaldes es fundamental; ellos pueden apoyar en la infraestructura escolar, llevando tecnología a los centros educativos y apoyando actividades de aprendizaje y formación docente.
Entre las ciudades intermedias se encuentran Quetzaltenango, Cobán, el área de Guatemágica-Reu, y el área Zacapa-Chiquimula. Además, se ha incluido la Antigua Guatemala como un destino turístico importante. Lo más importante para el éxito de las ciudades intermedias es elevar la productividad de las mismas, ello deriva en buena medida de la política económica del país, pero también pueden ayudar las políticas locales, y hacer esfuerzos integrados entre el sector productivo y la oferta de educación y capacitación técnica.
El INTECAP y otros centros de formación para el trabajo tienen un papel central en la preparación del recurso humano. Sus programas deben alinearse a las necesidades de las empresas locales.
Para consultar la fuente: http://www.s21.gt/2017/02/agenda-educativa-las-ciudades-intermedias/
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